jueves, 14 de abril de 2011

LAS RATAS ABANDONAN EL BARCO.

Desde hace unos años, el barco del PP hace aguas, y las grietas en su casco cada día son más amplias. En muchas localidades asistimos a movimientos de ediles del PP hacia otros partidos al grito de "sálvese quien pueda", también hemos podido ver como los jueces, al servicio de la política, han dejado el juicio de Gürtel para después de las elecciones del 22 de Mayo, quizás porque sería un mazazo en la cabeza que el partido no podría soportar, y de esta manera poder engañar al electorado otros cuatro años más.

Hundidos hasta la garganta en casos de corrupción, han decidido colocar a imputados por varios delitos en las listas electorales, un ejercicio de honradez donde los haya, vamos hay que estudiar y entrenarse a fondo para ser más deshonrado, políticamente hablando.

La última estupidez en la que han incurrido ha sido el colocar a Miralles, lider de UV en sus listas para, de esa manera, recoger algún que otro voto del valencianista autoengañado que todavía piensa que el PP le defiende. Ya que la imagen del PP por si sola está en entredicho, saben muy bién como deben hacerlo para embaucar al pueblo, como han hecho los últimos 16 años, utilizando la dictadura mediática de la cual hoy hacen gala en una noticia aparecida en Las Provincias: http://www.lasprovincias.es/20110414/mas-actualidad/politica/denuncia-televisiones-informar-sobre-201104141200.html?utm_source=twitterfeed&utm_medium=twitter

En contrapartida a este destructor que hace más aguas de las que puede soportar ya que se han dedicado a despilfarrar en los camarotes de los mandos en lugar de preocuparse de la integridad de la nave, en el cual la linea de flotación ya no se ve debido al peso de la corrupción, está el transatlántico de Coalicio Valenciana, quizás más lento en su navegar, pero con una integridad de su casco insuperable, una nave que recorre las corrientes de la honradez y la verdad, aguas que jamás ha surcado el destructor destruido del PP, que siempre ha navegado por aguas turbias que le han corroido el casco.

Francisco Puchades.